Según un informe del Inta Marcos Juárez, la secuencia supera en rentabilidad al maíz y la soja de primera.
Una vez más, la secuencia trigo-soja de segunda exhibe la mayor rentabilidad en los planteos agrícolas de la provincia, según un estudio elaborado por Carlos Ghida Daza, integrante del Grupo Economía del Inta Marcos Juárez.
Para el cálculo, que compara los márgenes brutos de la secuencia entre el cereal y la oleaginosa con los que aportan la soja y el maíz de primera implantación, se tuvieron en cuenta los precios agrícolas (informados por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires), y de los insumos (revista Márgenes Agropecuarios) de la primera semana de abril.
Se utilizó para el cálculo el manejo tradicional en siembra directa y los rendimientos promedio del último quinquenio de la provincia, según los datos del Ministerio de Agricultura de Córdoba. También, a partir de la importancia que tiene la producción realizada en alquiler, se utilizó en los márgenes del contratista, un valor de arrendamiento de 10,8 quintales de soja.
Resultados
En el caso de la soja de primera, y teniendo en cuenta que en los sistemas predominantes en la provincia en los que participa la oleaginosa (sistema agrícola y mixto ), en su estrato modal tienen volúmenes de producción de entre 501 a 1000 toneladas anuales, su contribución en concepto de retenciones a las exportaciones es de 30 por ciento.
A partir de esta referencia, el margen bruto para una soja de primera a 300 kilómetros del puerto es de 269,49 dólares por hectárea.
En el caso del maíz de primera, con una retención del 12 por ciento, su margen esperado para una producción también a 300 kilómetros del puerto es de 411,61 dólares por hectárea.
La combinación trigo/soja de segunda tiene un margen bruto para la misma distancia a puerto de 513,13 dólares por hectárea. “La soja de primera muestra menor efecto del flete en el resultado seguido por el doble cultivo y, con mayor efecto negativo de la distancia a puerto está el maíz. De esta forma, considerando una distancia a puerto de 300 kilómetros, el margen del doble cultivo supera a maíz por 24 por ciento y a soja de primera por 90 por ciento.
En campo arrendado, la sociedad trigo/soja también es más rentable que los cultivos de verano de primera implantación, incluso con mejores márgenes.
“Con una distancia a puerto de 300 kilómetros y con una retención de 30 por ciento para la soja, el doble cultivo supera al maíz en 55 por ciento y a la soja de primera en 108 por ciento”, precisa el informe que, a modo de conclusión, destaca la eficiencia de esa secuencia de cultivos.