Detrás de cada persona, hay un universo de facetas y pasiones que nos definen más allá de nuestro trabajo o profesión. Tiziana Prada, presidente del Foro de Genética Bovina y destacada productora Braford, no es la excepción. Detrás de su imponente figura de mujer ganadera, se esconde una mujer con un amor incondicional por los animales su familia y su país.
Mientras se prepara para lo que serán las NACIONALES de Braford, Brahman y Dorper, que se realizarán del 15 al 18 de mayo en la Sociedad Rural de Corrientes, Expoagro se dio el privilegio de conversar con ella, para conocer un poco más sobre la persona detrás del personaje.
¿Cuándo y por qué comenzó tu pasión por la raza Braford?
Mi pasión por la raza Braford comenzó en 2001 cuando, junto a mi padre y mi actual esposo Johnny Gutiérrez, decidimos reconvertir nuestro rodeo comercial Hereford con la raza Braford. Johnny, con su experiencia en la cabaña Tres Marías, nos motivó a crear nuestra propia cabaña y a medida que nos adentrábamos en el ambiente, descubrimos las ventajas de la raza y nos enamoramos de ella. Más que nada de lo que tiene que ver con este mejoramiento continuo. Cuando uno tiene una cabaña, levantando siempre la vara buscando lo mejor.
En 2003 asistimos al primer Congreso Mundial de la raza Braford en Argentina, donde conocimos a muchos criadores y nos contagiaron su entusiasmo.
Después dimos un salta importante, cuando en 2006, hicimos un viaje a Australia con una gira por muchas cabañas en Australia. Se gestó una gran camaradería con personas con las cuales compartimos hoy la comisión directiva. Se armó un grupo muy lindo. Así es como, rodeado de personas que comparten los mismos intereses, se va potenciando la pasión por la raza Braford.
Aparte Braford, ¿Qué otra pasión tenés?
También tenía una gran pasión por los caballos. Durante un tiempo, tuve que decidir qué estudiar y siempre quise ser veterinaria de animales grandes, incluso de animales salvajes. Llegué a investigar universidades en el extranjero para seguir esa carrera, pero finalmente decidí quedarme en Argentina y estudiar ingeniería en Producción Agropecuaria en la UCA. Aunque tuve la oportunidad de entrenar caballos y saltar en Europa, decidí dejar esa pasión y enfocarme en las vacas, que también me encantan.
Según nos contaron ¿Te quedaste con ganas de seguir estudiando?
Si, me puse a estudiar una Diplomatura en Cambio Climático y Manejo del Fuego porque me preocupa mucho. Primero, los fuegos que acosan todos los veranos a la zona donde estamos en Corrientes y otras; y el tema del Cambio Climático porque quisiera tener más argumentos propios y firmes con respecto a lo que es al ataque que recibimos continuamente de las urbes con respecto a que las vacas tienen una gran incidencia en lo que es el cambio climático y quiero defender a la ganadería.
Más allá de la ganadería y el estudio ¿Te queda tiempo para algún hobbie?
Actualmente, no tengo mucho tiempo debido a mis responsabilidades en el campo, las instituciones y cuidando de mis hijos Emilia y Horacio, de 12 y 14 años respectivamente.
Sí, aparte de mi trabajo en el campo y mis responsabilidades familiares, me encanta viajar. Para mí, viajar es casi tan enriquecedor como estudiar una carrera. Te permite abrir la mente, conocer otras culturas, tomar conciencia de otras realidades y maravillarte con la grandeza y belleza de este mundo. Mis hijos también aman viajar, y aunque en este momento me están taladrando el cerebro para ir a Europa, me encantaría visitar el Sudeste Asiático, específicamente Camboya y Tailandia. Aunque tengo que pensar en el bienestar de toda la familia, así que quizás Europa sea una mejor opción para nuestro próximo destino.
Tres enseñanzas que te dejó la dirigencia de la Asociación Braford Argentina
Algunas son innatas, pero destacaría tres principales:
En primer lugar, la importancia del detalle y la atención personalizada a cada uno de los miembros de la asociación. Cada socio, criador o periodista tiene un papel fundamental en el crecimiento y éxito de la raza, por lo que es esencial brindarles el tiempo y espacio necesarios para escuchar sus ideas y necesidades.
En segundo lugar, la importancia del trabajo en equipo, tanto dentro de la Comisión Directiva como con el staff de la asociación. Es fundamental valorar las virtudes de cada miembro del equipo y fomentar un ambiente de respeto y colaboración para alcanzar los objetivos.
Por último, aprendí que la paciencia, la empatía y la convicción son fundamentales para alcanzar metas a largo plazo y hacer una diferencia en la ganadería en general. Escuchar las diferentes opiniones y encontrar puntos en común puede llevar a soluciones que beneficien a toda la comunidad.
Bendita tu eres ¿Como es el trabajo en un sector donde predominan muchos hombres?
Una mujer ganadera en un sector predominantemente masculino puede sentirse un poco intimidada al principio, pero creo que lo más importante es demostrar habilidades y capacidades. Al igual que en cualquier trabajo, se trata de ganarse el respeto y la confianza de los demás.
Personalmente, creo que la complementación de hombres y mujeres en el trabajo es fundamental. Las mujeres aportan una perspectiva diferente, están más en el detalle y pueden ser más empáticas, mientras que los hombres pueden ser más ejecutores. Ambos puntos de vista son necesarios para lograr objetivos. Uno mira desde arriba de una mesa y el otro, sentado. Eso es muy enriquecedor.
Me siento cómoda en este ambiente y creo que las mujeres tienen mucho que aportar en la producción y en las instituciones. Las veo más en el campo pero cuando uno les pide de comprometerse a nivel institución está más complicado. Después, una vez que se animan no las para nadie.
Espero ver más mujeres involucradas en las instituciones el futuro.
¿Una anécdota que se pueda compartir?
Hay muchas anécdotas y momentos compartidos en las reuniones y exposiciones de Braford que son inolvidables. La pasión por la ganadería nos une y a través de ella creamos momentos de complicidad y risas, como cuando nos reunimos alrededor de un fogón o en los Zooms. Braford es una raza que destaca no solo por su excelencia genética y competitividad, sino también por su enfoque en lo social y en la importancia de pasar un buen rato juntos. Por eso, siempre se busca crear momentos para la diversión y el baile, porque la ganadería no solo es un negocio, sino también un ámbito social donde podemos aprender a disfrutar más de la vida.
Así es Tiziana Prada, la mujer detrás del personaje. Una persona auténtica, apasionada y comprometida con lo que hace. Y aunque su día a día esté lleno de reuniones, llamadas y compromisos, siempre encontrará un momento para conectar con su verdadero yo, el que late fuerte por la ganadería y por su querido campo.
Expoagro
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